FOTO: Antonio Villalón, Otoño 2006.
Nombre vulgar:
Mongui
Toxicidad:
Seta considerada tóxica, de efectos
alucinógenos leves.
Descripción:
Sombrero de hasta 4 cm. de diámetro, ovoide y pardo
en los jóvenes y gris y acampanado en los adultos, con margen
apendiculado por restos blancos de velo, característicos de la especie.
Pie hasta 12 cm. de longitud, delgado, hueco, pardusco e igual, con micelio
blanco en la base.
Láminas apretadas y desiguales, de color gris.
Carne muy delgada, pardusca, con olor y sabor suaves.
Hábitat:
En praderas y sobre excrementos de ganado, de primavera a
otoño.
Observaciones:
Esta seta se consideró durante años un
clásico de los hongos alucinógenos psilocíbicos, aunque en
realidad contiene una cantidad de psilocibina o derivados casi nula.